PROTECCIÓN CONTRA LOS RIESGOS MÁS COMUNES
Algunos de los riesgos más comunes en las obras de construcción y minería son la electricidad y las altas temperaturas, así como la exposición a los rayos UV cuando se trabaja al aire libre bajo el sol. Cuando hay electricidad, el fuego y las explosiones son siempre una amenaza. Y trabajar durante largas horas bajo el calor del Sol puede suponer un importante riesgo de estrés térmico. Por tanto, los equipos de seguridad para la construcción que protegen a los trabajadores de los arcos eléctricos, el fuego, el calor y los dañinos rayos UV son imprescindibles.
Además, el fuego y las explosiones son también peligros comunes de los que deben protegerse los trabajadores de la construcción y los mineros. Estos trabajadores corren además el riesgo de sufrir hipotermia por trabajar en entornos muy fríos, especialmente en invierno, y de lesionarse por manipular maquinaria y equipos en la oscuridad. Es esencial disponer de equipos de seguridad adecuados para la construcción y la minería que cuenten con materiales altamente reflectantes y proporcionen protección contra el frío.